Emdbräu

Cerveza tipo pale lager de las que podríamos considerar "tipo familiar" por ser realmente barata además de encontrarse sólo en supermercados. Mucha espuma, blanca y muy esponjosa, de la que disipa lentamente una buena parte, aunque quedando siempre una capa bastante generosa. Cuerpo ligero, prácticamente acuoso, de color amarillo pálido, transparente y con burbuja muy grande y muy viva. Muy poco aroma, bastante dulce, en el que destaca la malta y algo herbáceo. El sabor es malta muy suave con algo de hierba y un lúpulo fuerte pero con regusto extraño. El final, muy corto, tiene algunas notas de malta que desaparecen muy pronto, dejando el regusto extraño del lúpulo. 4,5% de alcohol.

Como todas las lager, lo ideal para servirla es un vaso de plástico, pero esta cerveza tiene tan poco que ofrecer que lo ideal es tomarla con mucha gaseosa fría (y no es chiste).

Estribos

Otra cerveza aromatizada más en el mercado, en este caso en una conocida cadena internacional, siendo una cerveza especial con aroma de tequila.

Abundante espuma, blanco-amarillenta, de textura esponjosa y que disipa rápidamente en su totalidad. Cuerpo ligero de color dorado, totalmente transparente, con burbuja abundante, pequeña y muy chisposa como la de una gaseosa. El aroma, dulzón, es casi imperceptible. El sabor es el de una clara de limón con más gaseosa que cerveza, en el que se nota algo de malta y un sabor químico muy fuerte que le da amargor y un regusto que se quiere parecer a tequila. El final es corto, y, como la clara, persiste en él ese regusto químico amargo y podría ser un poco más refrescante si no fuera por su 5,9% de alcohol, bastante alto para este tipo de cerveza.

Siendo la base una lager, lo ideal para servirla es un vaso o jarra ancha, de todos modos, no hay mucho que degustar, así que se puede beber perfectamente en la botella o en un vaso de plástico...

Petrus Blond

Cerveza tipo ale rubia con muy poca espuma de color blanco mate y que se disipa bastante rápido aunque dejando un ligero rastro. Cuerpo de ligero a medio, dorado intenso, casi transparente y con burbuja pequeña y rabiosa. Aroma a malta, pan poco hecho y frutas frescas. El sabor es malta y frutas, con un buen lúpulo amargo pero muy compensado con el dulzor de malta y fruta. El final, no muy largo, es muy compensado, sin destacar ni lo dulce ni lo amargo, resultando además muy refrescante a pesar de su elevado 6,6% de alcohol.

Se recomienda servirla muy fría y acepta muy bien una copa tipo cáliz o un vaso ancho de paredes gruesas.

Radeberger Pilsner

Nacida en la corte real de Dresde en 1872 bajo el auspicio de Federico Augusto III de Sajonia, esta cerveza tipo pilsener, ya es una histórica.

Poca espuma, muy blanca y que se disipa con muchísima rapidez. Cuerpo ligero, dorado, totalmente transparente y con carbonatación media. Poco aroma e el que destaca la malta, cereal y algo de hierba y miel. El sabor está algo descompensado, destacando mucho el lúpulo sobre la malta, con algunas notas también herbáceas, aunque esa fuerza del lúpulo, en su descarga, la convierte en una cerveza muy refrescante. El final es corto, amargo y muy fresco, pidiendo pronto otro trago. Alcohol razonable para una cerveza de este tipo, 4,8%.

Se suele servir muy fría en vaso de tubo o copa alta y estrecha.